miércoles, 3 de abril de 2013

Sesión 1: Del Fordismo hacia las bifurcaciones del ajuste productivo

Del Fordismo hacia las bifurcaciones del ajuste productivo (27 de febrero de 2013)

El profesor Omar de León inicia la sesión correspondiente a la asignatura Innovación y desarrollo: experiencias y teorías en Europa y América Latina con una descripción diacrónica los antecedentes del Paradigma del Desarrollo Territorial (PDT) desde la perspectiva de la Innovación. Los antecedentes se remontan a la situación desoladora que experimentaban tanto Estados Unidos como Europa, tras la Segunda Guerra Mundial. En este contexto de decaimiento (también) a nivel tecnológico, surge el Fordismo como sistema productivo dominante en el sector industrial, las características fundamentales  de este sistema son tres: la producción masiva de bienes indiferenciados (surgiendo así la empresa transnacional), el consumo masivo (redistribución) y la estimulación masiva (mass media).  Como es sabido, este sistema, asociado a las políticas keynesianas consiguió mantenerse hasta mediados de los años 60, periodo en el cual se experimenta una crisis como consecuencia de diversos factores. Esto es, que comenzó a manifestar señales de agotamiento, pues los caminos para la recuperación de la lucratividad  y productividad quedaron estancados. En tal razón, encaminaron a nuevos escenarios en ámbitos tecno-productivos y organizacionales, lo que supuso cambios en la re-estructuración, racionalización y en la tecnología. Esta nueva visión del sistema pretendía dos cuestiones:  una, reducir los costos de la reproducción de la fuerza de trabajo (a través de la eliminación de las garantías de empleo, la revisión de los beneficios indirectos, el debilitamiento del poder sindical y la flexibilización de la  jornada de trabajo); y dos, utilización de las potencialidades tecnológicas de la automatización como soporte material a fin de re-modelar la organización del trabajo, los procesos de producción y la cualidad de los productos. Esto supone un nuevo modelo de producción flexible, íntimamente ligado a nuevas formas de organización y así como nuevas formas tecnológicas.  Esta transformación productiva, desde la perspectiva capitalista,  trajo consigo miradas a nuevos nichos de consumo, que a su vez permitió: la segmentación de los mercados y la descentralización productiva. La primera, hizo re-descubrir el Marketing, descubrir las variables psicológicas, la separación de coste-precios. Y la segunda, la subcontratación (red de PYMES), certificación-calidad, costes de transacción, costes laborales, talleres flexibles. 
Si bien la crisis en esa época fue un problema estructural, al que se planteó y efectuó "soluciones" a nivel productivo,  las decisiones o ajustes realizados a tal sistema han traído bifurcaciones o efectos no deseados, que no sólo se experimentaron en su momento, sino se vienen experimentando hoy en día. Prueba de ello, están las economías de desarrollo difuso (nada claras, ni conocidas), y por el otro lado, se experimenta la aparición de agencias, al estilo Toyotista, que brindan servicios a través de pequeñas empresas (encargadas de diseñar los trabajos). A título personal y en concordancia con el profesor, se considera útil conocer estas experiencias que la historia ha registrado, específicamente, en lo relacionado con la innovación y desarrollo, dicho sea el caso, dado que,  conocer estos aspectos históricos puede dar nociones básicas que  permitan tener una visión  crítica en cuanto a  la deliberación de criterios a la hora formular propuestas de innovación relacionadas con desarrollo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario